Que no hayas alcanzado tu objetivo significa únicamente que no lo has alcanzado todavía. El fracaso es solo un juicio sobre los resultados a corto plazo. En este artículo te muestro, en 3 simples pasos, cómo sacar provecho de tu “fracaso” viéndolo bajo una perspectiva diferente para convertirlo en oportunidad de crecimiento.
Fracaso no significa que hemos actuado mal.
Significa que no hemos hecho lo que hacía falta hacer.
Fracaso no significa falta de capacidad.
Significa que necesitamos hacer las cosas de una manera diferente.
Fracaso no significa que la vida no nos apoya.
Significa que la vida tiene algo mejor reservado para nosotros.
Fracaso no significa que todo ha terminado.
Significa que necesitamos volver a empezar.
Como puedes darte cuenta el fracaso es una interpretación que tú eliges hacer de lo sucedido. Hay una gran diferencia entre la “realidad de lo sucedido” y “la Interpretación” que eliges hacer de esa realidad.
Las “Interpretaciones” que hacemos nos abren o cierran “espacios para la acción”, un espacio para la acción es un lugar en tu interior desde donde te permites verte a ti mismo con recursos y opciones para lograr tus metas. Dependiendo de la “Interpretación” que elijas hacer será el tamaño y calidad de ese espacio para la acción.
¿Qué crees que te da mejores resultados en tu interpretación?
¿De qué manera puedes interpretar unas situaciones para tener recursos y opciones?
“No vemos la realidad como es, la vemos como somos nosotros.” Buda
Estrategia 1: Para Transformar el fracaso en oportunidad
Distingue entre capacidad y posibilidad
Puedes preguntarte:
¿No puedes o no sabes hacer algo? Hay una gran diferencia entre posibilidad y capacidad.
Ejemplo: Puede que aun no sepas cómo hacer algo pero eso no quiere decir que no sea posible para ti hacerlo, de tal manera que solo necesitas aprender cómo hacerlo. Esto te dará una nueva visión de posibilidad en tu vida, la próxima vez que te encuentres en una situación que te parezca “imposible” pregúntate: ¿Es en verdad imposible o es solo que aun no sabes cómo manejarla? Eso te dará opciones para actuar e incrementará tu confianza.
Un tip adicional: Es bueno recordar que aunque quieras no puedes fracasar porque tu cerebro está diseñado para el éxito ya que es la máquina más sofisticada que existe como producto de miles de años de evolución, tienes todos los recursos dentro de ti ahora mismo, al alcance de tu cerebro. Solo necesitas aprender a entender que es así y darle otro enfoque a tu manera de verte a ti mismo y a tus posibilidades. Por otro lado, aprender a hacer, es en parte, de lo que se trata la vida y para lo que fue diseñada la más poderosa herramienta que posees: tu mente. ¿No te parece genial?
Estrategia 2: Para Transformar el fracaso en oportunidad
Aprecia tu esfuerzo
En vez de pensar que has fracasado y que lo “hiciste mal” piensa que lo estás haciendo lo mejor posible y puedes hacerlo mejor.
Recuerda que todo comportamiento tiene un propósito, incluso si “fallas” en lograr un objetivo, eso solo significa que puedes elegir hacerlo de otra forma; si te calmas, no te desanimas y tienes la disposición de apreciar tu esfuerzo te darás cuenta que eres capaz de hacer cosas que te acerquen a tu objetivo, solo que la próxima vez te acercarás de una forma diferente.
Apreciar tu esfuerzo te permite apreciarte a ti mismo, para pensar las opciones y alternativas, cambiando el enfoque de lo que aun no te sale a lo mucho que aun puedes lograr.
Para eso pregúntate:
¿En qué te enfocas, en todo lo que tienes o en lo que te falta?
¿En lo mucho que sabes o en lo que aun no dominas?
¿En todo lo que puedes o en lo que aun no aprendes a realizar?
“La persona que realmente quiere hacer algo, encuentra la forma de hacerlo, las demás encuentran razones y excusas.”
Estrategia 3: Para transformar el fracaso en oportunidad
Interpretación no es realidad.
Los hechos nos muestran que hemos hecho una cosa u otra.
La interpretación: “fracaso” solo vive en el diálogo que utilizamos para explicar dichos hechos.
Eres tú quien elige vivir esa explicación como si fuera el hecho sin darte cuenta que solo es una interpretación que al vivirla o sentirla como si fuera cierta te deja sin recursos ni posibilidades.
En consecuencia: Es más conveniente que construyas deliberadamente una explicación que te genera opciones y posibilidades y eso puedes hacerlo, porque en el espacio de tu propia mente solo piensas tú.
Recuerda: El dolor es biológico pero el sufrimiento es lingüístico, porque vive en la conversación o lenguaje por medio de la interpretación que hacemos de los hechos ocurridos y que vivimos como si fueran verdad.
Tú puedes elegir qué interpretación construir y de cara a cada “problema” está en ti poder ver la oportunidad.
Si deseas comprender actúa.