Luego del derrumbe económico mundial vivido a fines de 2008 y en buena parte del 2009, algunas compañías que operan localmente podrían retomar, para 2010, proyectos de largo plazo que en su momento congelaron con el objetivo de optimizar recursos y hacer frente a las dificultades. En este sentido, hay ciertos puntos que es importante considerar para ofrecer ventajas competitivas al mercado:
1) Servicios adecuados: flexibilidad e inteligencia para adecuar el servicio a la realidad los clientes, sobre todo en contextos económicos dinámicos y cambiantes como en Argentina.
2) Constancia: mantener el contacto permanente con posibles clientes para que conozcan los servicios y puedan considerarlos en el corto, mediano y/o largo plazo.
3) Personalización: del otro lado siempre hay una persona. Es preciso tener la inteligencia suficiente para saber hablar y callar en los momentos indicados. Comprender la realidad del cliente nos ayuda a generar diferentes tipos de vínculos.
4) Calidad: comprender que el valor competitivo es la calidad, cumpliendo los Acuerdos de Nivel de Servicio.
5) Planes de carrera y proyectos a largo plazo: los planes de carrera suelen ser una herramienta eficiente para atraer a los mejores recursos. El trabajo no es únicamente una fuente de ingresos económicos, sino también una espacio para alcanzar logros y satisfacción personal. En la medida que la empresa ayude a sus recursos a proyectar a futuro, la fidelización de dichos recursos será un objetivo mucho más cercano, sobre todo en una industria tan particular como la tecnológica. Este factor está vinculado, sin dudas, a los proyectos que la compañía tenga a mediano plazo, lo cual aportará trayectoria presencia y especialización a la credibilidad de la compañía.