Las empresas con mayor porcentaje de mujeres en posiciones gerenciales dieron 34% más de beneficio económico a los accionistas en comparación con las compañías en donde las mujeres tienen una menor representación. Sin embargo, solo 12% de las compañías globales tienen mujeres como CEO.
A pesar de que se han hecho grandes progresos desde el día en que por primera vez se marcó en el calendario el Día de la Mujer en 1911, más de un siglo después la igualdad de género sigue siendo un gran desafío.
En este mes de la mujer, nosotros también hemos unido nuestras fuerzas con las mujeres de las naciones unidas para apoyar al género y eliminar la discriminación.
Creemos que los hombres deben ser solidarios con las mujeres y niñas del mundo, razón por la cual estamos apoyando la campaña HeforShe (ÉlparaElla), un movimiento global de hombres que están del lado de la igualdad de género.
Esperamos que miles de líderes de negocios se unan también. Impulsamos este pedido no solo porque creemos que es lo correcto sino también porque constituye una prioridad para el negocio y para lograr una economía más inclusiva.
Los hechos son condenatorios. Todavía se les paga en promedio a las mujeres un 10 – 30% menos que a los hombres, y 16% menos en los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos). Solo 12% de las compañías globales tienen mujeres como CEO y a pesar de que cada vez más mujeres se gradúan de carreras terciarias y universitarias, un abrumador 79% de los nuevos graduados contratados son hombres. Aún así, el caso de negocios de mayor diversidad nunca ha sido más claro.
Un estudio reciente de las 500 compañías de Fortune demostró que las empresas con mayor porcentaje de mujeres en posiciones gerenciales dieron 34% más de beneficio económico a los accionistas en comparación con las compañías en donde las mujeres tienen una menor representación.
Las mujeres que trabajan benefician a las economías. De acuerdo a Goldman Sachs, si la tasa de empleo de las mujeres en el mundo desarrollado se elevara hasta equipararse con la de los hombres, el nivel total de PBI de un país crecer por encima de 12% en promedio.
Si bien constituyen 32% de la fuerza de trabajo global, un estudio de Grant Thornton demuestra que con las tendencias actuales, hasta el año 2096 las mujeres no tendrán el mismo poder económico y oportunidades que los hombres. Esperar hasta el final de este siglo es simplemente una perdida enorme, para nuestras hijas y nietas, para las sociedades y nuestras economías.
Hacia el fin de esta década otras 856 millones de mujeres ingresarán a la fuerza de trabajo. Es crítico que estas mujeres gocen de la igualdad de oportunidad y de la posibilidad de contribuir con todo su potencial. Como líderes de negocios, podemos ayudar a liderar el camino y conducir la transición hacia una economía más justa e inclusiva. Se debe comenzar con iguales oportunidades para hombres y mujeres y es tiempo de escalar nuestros esfuerzos combinados.
Los negocios necesitan celebrar y cultivar la diversidad, incluyendo la de género en todos los niveles, como un impulso vital de creatividad e innovación. Nivelar el campo de juego para todos requerirá la transformación de los modelos y culturas de negocio, re-evaluando las estructuras de incentivos y transformando la dirección. Si queremos tener éxito, necesitamos diseñar lugares de trabajo en los que mujeres y hombres puedan desarrollarse.
Desde re-escribir las políticas de licencias de los padres hasta establecer programas de acompañamiento y definir caminos claros hacia la evolución, como líderes de negocio, creemos que la mejor manera de acelerar el movimiento por la igualdad de género es comenzar en casa transformando nuestras propias compañías e inclusiva.
Pero si bien es clave construir organizaciones con un balance de género para crear una sociedad donde las mujeres sean realmente empoderadas, en el negocio podemos y debemos hacer mucho más. Necesitamos promover la seguridad para las mujeres en las comunidades donde operamos, expandir las oportunidades para ellas en nuestras cadenas de abastecimiento extendidas y mejorar su acceso a la capacitación y entrenamiento. Todos estos pasos ayudarán a mejorar sus
perspectivas, sustento y frutos. Es ampliamente aceptado que empoderar a las mujeres es la intervención simple más importante para mejorar el desarrollo económico y social. Sólo consideremos la escala de cambio que se puede lograr si todos los negocios abrazaran esta causa – la creación de un círculo virtuoso abre las puertas a un potencial tanto más apasionante.
En el contexto del Día Internacional de la Mujer y en su mes, hacemos un llamamiento a los líderes de negocios para que se comprometan con HeForShe y junto con nosotros tomen medidas en contra de todas las formas de violencia y discriminación que enfrentan las mujeres y construyan compañías que valoren verdaderamente la diversidad. Hemos comenzado a recorrer este camino.
Sir Richard Branson es fundador del Virgin Group, y co- fundador y co-presidente de The B Team. En 2004, Richard estableció Virgin Unite, su fundación sin fines de lucro que moviliza el talento y los recursos del Virgin Group para afrontar los problemas sociales y ambientales serios en forma emprendedora.
Paul Polman es CEO de la compañía de consumo masivo, Unilever. Presta sus servicios en el Consejo Asesor de Líderes del Sector Privado de la ONU Mujeres y es Campeón de HeForShe IMPACT.
François-Henri Pinault se convirtió en CEO y presidente de Kering en 2005, compañía que se ha erigido en líder mundial de aparatos y accesorios de lujo, deportes estilo de vida. Fundó y preside la Fundación Kering, que combate la violencia contra las mujeres.