Enfrentarse a un proceso de compra de un nuevo auto implica entrar a valorar numerosas opciones hasta alcanzar una decisión final. Al tratarse de una compra que requiere un desembolso importante, es normal que como comprador intentes encontrar la mejor alternativa en precio y prestaciones. En este punto entran en juego dos opciones interesantes que compiten en el mercado: comprar un auto completamente nuevo o buscar un auto usado con un precio más asequible. Aquí te presentamos los detalles estos dos tipos de auto.
Ventajas y desventajas de un auto nuevo
Si buscas un vehículo a tu medida con opciones de personalización y donde puedas elegir exactamente todos los detalles del auto, tu elección debe ser un auto nuevo. Este tipo de vehículo no solamente te permite elegir con precisión características como el tipo de motor, color de pintura, acabados o equipamiento sino que es la que ofrece más garantía por parte del fabricante. En general, todos los concesionarios cuentan con un stock de autos suficiente para cubrir todas las necesidades de los clientes, pero incluso si el coche perfecto no está disponible, el fabricante seguramente te podrá ofrecer tu auto a medida bajo pedido.
La contrapartida de poder elegir es sin duda el precio. Un auto nuevo es la opción más cara disponible. Aún así, es posible que entre los vehículos ya disponibles en el concesionario existan ofertas interesantes a valorar. Otro punto a favor el auto nuevo es la garantía que te da el fabricante.
Auto usado, la opción más económica
Sin duda la gran ventaja de un auto usado es el precio. Eso significa que puedes hacerte con ese modelo que tanto te gusta pero a un precio sensiblemente menor que si lo compraras nuevo. Eso ocurre porqué la depreciación del valor de un auto es relativamente rápida por lo que también tienes que tener eso en cuenta si te interesa venderlo posteriormente. Algunos modelos pueden llegar a perder hasta un 40% de su valor al final del primer año de uso.
El inconveniente principal del auto usado es que no se pueden realizar cambios en sus características, es decir, la variedad para elegir es mucho menor que en un auto nuevo. Por tanto, si encuentras un auto usado que se ajuste a tus necesidades, no lo dudes, es la opción más interesante. Como precaución, es aconsejable que un mecánico de confianza revise el auto antes de la compra para asegurarte que todo funciona correctamente.
Por supuesto, sea cual sea tu elección, no debes olvidar que debes formalizar el seguro del auto. En el caso de los autos usados hay que tener en cuenta que deberás cambiar la propiedad antes de la contratación del seguro del auto. Por lo demás, todo funciona igual que en un auto nuevo y por lo general, los precios de los seguros son más asequibles en un auto usado.