Ya se inició la aprobación para el ingreso del país al AIIB. Pero aún está pendiente de completar el proceso de admisión, que requiere la ratificación parlamentaria y el depósito del primer pago de su participación en el capital de la entidad.
Los objetivo principales del Banco Asiático de Inversiones en Infraestructura (AIIB), que fue fundado en Pekín en octubre de 2014, son estimular la cooperación financiera en la región y financiar proyectos de infraestructura en Asia: desde la construcción de carreteras y aeropuertos hasta de antenas de comunicación y viviendas económicas.
La creación del nuevo banco fue parte del plan de China para construir “una nueva ruta de la seda”, una iniciativa del presidente chino, Xi Jinping, para abrir nuevas rutas comerciales.
En ese marco y tras la reciente visita del presidente Mauricio Macri a China, hoy se conoció que se inició la aprobación de tres países para que ingresen al AIIB, entre ellos Argentina. Sin embargo aún están pendientes de completar el proceso de ingreso, que requiere la ratificación parlamentaria y el depósito del primer pago de su participación en el capital de la entidad.
Beneficios
De concretarse el ingreso, el beneficio para Argentina como miembro de la institución será a través del rendimiento que pueda percibir por los fondos que aporte. Pero, claramente, el más importante es la posibilidad a recibir financiamiento para obras de infraestructura.
El país podrá optar por financiamientos totales o parciales por parte del AIIB para el desarrollo de proyectos de infraestructura de gran impacto, que beneficien a la población, sean respetuosos del medio ambiente y garanticen el retorno y rentabilidad de dichas inversiones, en áreas como sistema transporte, energía, puertos, aeropuertos, electricidad, entre otras.
El presidente del AIIB sostuvo hoy que “la infraestructura bien integrada y la mayor conectividad entre Asia y el resto del mundo tienen grandes beneficios para la economía global”. Y en esa línea , destacó que “Argentina y Madagascar son importantes economías de América del Sur y África, respectivamente”, y que espera que ese sea “el papel que jueguen nuestros nuevos miembros una vez que se unan al Banco‘.
El banco
El AIIB comenzó oficialmente su actividad en octubre de 2014 y tiene entre otros miembros a Reino Unido, Francia, Alemania, España, Rusia, Italia o Corea del Sur, con destacadas ausencias como Estados Unidos o Japón.
El banco ofrece financiamiento soberano (a países), subsoberano (provincias, por ejemplo) y no soberano (directamente a empresas) para proyectos de infraestructura a través de distintos medios, sobre todo préstamos pero también inversiones de capital (incluso a través de acciones de empresas, siempre que no lleguen al control de las mismas), y garantías.
Fuente: El Cronista
