BMW ha presentado el modelo i8 sin espejos retrovisores y con un sistema de cámaras que ejerce las funciones de estos elementos, en una iniciativa pionera de la marca alemana.
De hecho, esta es la primera vez en que un sistema de cámaras ofrece a los conductores de BMW una forma pionera de visibilidad trasera con el potencial de reemplazar los retrovisores exteriores convencionales.
Aunque se utilicen diferentes versiones de los asistentes de cámaras para el conductor, aún no ha habido un uso digital del retrovisor que puede ser utilizado en vehículos en serie, señala la compañía.
BMW Group también ha realizado demostraciones de un BMW i3 con Retrovisor Extendido para mostrar cómo los sistemas de cámara pueden ampliar el campo de visión de manera conjunta con los retrovisores ya existentes y como resultado de ello, mejorar la seguridad.
BMW i8 Mirrorless incorpora dos cámaras de “aspecto insignificante”, señala la emrpesa, que se encuentran acomodadas en enganches aerodinámicos, que sustituyen a los espejos ya existentes. Cuentan con una tercera cámara montada en el borde superior del parabrisas trasero.
Todas las imágenes se unen y son mostradas como una sola imagen en alta resolución suspendida en la posición del espejo retrovisor. La imagen del tráfico trasero cubre un mayor ángulo de visión de lo que se podría ver utilizando sólo los espejos del interior y exterior, y además no es necesario ajustar las imágenes.
“Incluso los usuarios de carretera pequeños y dinámicos como motociclistas pueden ser grabados por la cámara o bien directamente por la visión de la ventana lateral”, de modo que los peligrosos “puntos ciegos” están destinados a ser cosa del pasado”, afirma la compañía.