Como parte de su esfuerzo por reducir el impacto ambiental en África, Boeing y South African Airways (SAA) anunciaron que trabajarán en un combustible generado a partir de una nueva planta de tabaco. SkyNRG se encargará de crear el nuevo biocombustible usando el aceite de las semillas de una planta de tabaco modificada llamada Solaris, la cual es libre de nicotina.
El proyecto ya se encuentra en fase de prueba y se espera que las granjas crezcan en los próximos años. De acuerdo a Boeing, el uso de esta planta híbrida permitirá aprovechar los conocimientos de los productores de tabaco en la región para crear un biocombustible comercial. Con el paso del tiempo la compañía espera extraer combustible no solo de las semillas sino del restante de la planta.
El tabaco es uno de los negocios más fuertes en Sudáfrica. Tan solo el año pasado fueron producidos poco más de 15 millones de kilogramos de tabaco, principalmente para cigarrillos. De acuerdo a Boeing, el uso de biocombustible reduce las emisiones de carbono entre un 50 y 80 por ciento comparado con el combustible actual, aunque ambientalistas han cuestionado durante mucho tiempo esta afirmación.
Boeing lleva trabajando bastantes años en este tema ya que después de todo, los aviones son de los vehículos más contaminantes que existen. Si hacemos un poco de memoria, en 2011 se anunció el primer vuelo trasatlántico de un avión B747, luego en 2012 LAN realizó un vuelo entre Santiago y Concepción (Chile) usando tres mil kilos de biocombustible traidos desde Estados Unidos.