La icónica empresa de neumáticos Bridgestone está impulsando el futuro de la movilidad con una innovación que promete cambiar las reglas del juego: neumáticos sin aire. Diseñados para soportar vehículos de hasta una tonelada y velocidades de 60 km/h, estos neumáticos anti-pinchaduras podrían eliminar las paradas por emergencias y reforzar la seguridad en vehículos autónomos.
Neumáticos Sin Aire: La Tecnología del Futuro
El prototipo de Bridgestone, desarrollado mediante simulaciones computacionales avanzadas, está diseñado para soportar altas velocidades y pesos considerables. Esto lo convierte en una solución clave para vehículos autónomos, especialmente en zonas rurales de Japón, donde la escasez de conductores y mecánicos es un problema crítico.
La estructura única de estos neumáticos, compuesta por radios recubiertos de caucho, elimina el riesgo de pinchazos y reduce los costos de mantenimiento. Sin embargo, el alto costo de producción —hasta cinco veces más que un neumático tradicional— y desafíos técnicos como el ruido y la expulsión de piedras desde las radios, plantean dudas sobre su viabilidad comercial a corto plazo.
Bridgestone vs. Michelin: La Carrera por la Innovación
Mientras Bridgestone apuesta fuerte por los vehículos autónomos y turísticos, su competidor Michelin ha adoptado un enfoque más conservador. Michelin, pionero en neumáticos sin aire con su modelo Tweel, admite que esta tecnología aún tiene limitaciones y solo es viable en aplicaciones específicas, como cortacéspedes y furgonetas de reparto.
Florent Menegaux, CEO de Michelin, ha calificado de «utopía costosa» la idea de reemplazar todos los neumáticos tradicionales por versiones sin aire. Aunque los analistas reconocen el potencial de la tecnología, también advierten sobre los riesgos en términos de rendimiento y durabilidad a velocidades superiores a 50 km/h.
El Desafío de los Mercados Asiáticos
La presión en el mercado global de neumáticos es evidente. China e India dominan con productos más baratos, lo que ha llevado a una caída del 5% anual en las ventas de neumáticos tradicionales. Bridgestone busca reinventarse ofreciendo neumáticos recauchutados con una vida útil de 10 años, un modelo de servicio recurrente que podría atraer a consumidores conscientes de los costos.
Sin embargo, David Shaw, de Tire Industry Research, expresa escepticismo:
«Los neumáticos son una molestia. Alguien tiene que resolverlo, pero aún no está claro si estas soluciones cumplirán con los requisitos de durabilidad y precio.»
Japón: Laboratorio de Pruebas
En Japón, Bridgestone ya está probando un vehículo autónomo de seis plazas en zonas montañosas con población envejecida. Masaki Ota, representante de Bridgestone, afirma:
«No sabemos cuándo ni cómo generará ganancias, pero no podemos esperar. La movilidad del futuro requiere soluciones audaces.»