Coface, la empresa francesa especialista en la gestión, protección y financiación del crédito comercial, anunció que España es el tercer gran país industrializado puesto bajo vigilancia negativa en 2007. En efecto, España presenta un riesgo de contagio de la crisis inmobiliaria y su situación se asemeja a la de EEUU y el Reino Unido, puestos bajo vigilancia negativa por Coface en Abril y Julio respectivamente.
Esto se debe a que la tasa de endeudamiento de los hogares en España está alcanzando proporciones comparables a las del Reino Unido y EEUU (130%, 163% y 138% respectivamente). La inversión de las empresas, también muy endeudadas, sufrirá igualmente del estrechamiento del crédito.
Por tanto, el crecimiento español debería ralentizarse y caer a un 2,9% en 2008, frente a un 3,8% este año, debido sobre todo, a la baja de la inversión de los hogares, que contribuye significativamente al crecimiento y al empleo, y a una ralentización del consumo de los hogares, que podría pasar del 3,2% al 2,7%.
Por su parte, el comportamiento de pago de las empresas, satisfactorio hasta la fecha, podría empeorar. Las pymes ligadas al mercado de la vivienda (segunda-mano, agencias inmobiliarias, fabricantes y distribuidores de materiales y equipamientos el hogar), que se han multiplicado recientemente, se encuentran a menudo endeudadas y expuestas a la recesión del crecimiento.
España es el tercer país industrializado puesto bajo vigilancia negativa por Coface desde principios de año. “España comparte con Estados Unidos y el Reino Unido el peligroso cocktail de la burbuja inmobiliaria y sobreendeudamiento de los hogares” explica Yves Zlotowski, Chief economist de Coface.
Por otro lado, Coface mantiene la vigilancia negativa puesta el pasado 10 de Abril sobre Estados Unidos. Coface señaló entonces los signos de la ralentización de la economía americana, las dificultades del mercado inmobiliario, así como el estrechamiento del crédito y su posible impacto sobre la salud financiera de las empresas. La situación del Reino Unido presenta fuertes similitudes con la de Estados Unidos, por lo que Coface mantiene igualmente la vigilancia negativa que había puesto sobre este país el 10 de Julio.
Por último, Coface considera que la recesión americana podría prolongarse en 2008. Aunque el comportamiento de pago de las empresas continúe siendo globalmente bueno, ciertas empresas, sobre todos las financiadas por LBOs (Leveraged Buyout), podrían debilitarse, más aún si deben enfrentar un “credit crunch” o crisis de liquidez. Asimismo, se espera una recesión en el Reino Unido, siendo los sectores más vulnerables el del comercio minorista y sectores relacionados.