Los CEO no están equipados para prevenir la dirección que tomarán sus negocios en el futuro. La conclusión pertenece a una evaluación reciente de Chief Executive de 25.000 respondentes en 175 países.
De siete elementos fundamentales, la “capacidad de anticipar” salió siempre última. Por eso, Chief Executive, además de elaborar consejos para corregir esta falencia, sostiene que los líderes de empresa deberían mantener una visión a 20 años en lugar de 4.
Ellos aconsejan:
Prestar atención a las mega tendencias. Algunas tendencias tienen corta vida. Pero las mega tendencias – como el crecimiento o caída de la población, la influencia del surgimiento de la economía de mercado o del lanzamiento de tecnologías revolucionarias como la PC o el dispositivo móvil – son temas que no desaparecen y afectarán a todos los negocios.
Prepararse para las incertidumbres ambientales. Son esas fuerzas que cambian y que no se pueden prever adecuadamente en trayectoria o dirección. Si bien desconocidos, está la oportunidad de prepararse para estos cambios imaginando fuerzas poderosas que podrían llegar a alterar los negocios. Ese ejercicio iluminará las incertidumbres.
Considerar cuidadosamente las estrategias futuras de los competidores. La anticipación competitiva requiere más que reunir información; requiere hacer un ejercicio de imaginación sobre cuáles podrían ser los movimientos y esfuerzos innovadores de la competencia o los pasos estratégicos que puedan aguardar a medida que cambian las condiciones.
Acercarse a los consumidores. Todo lo que se acepta sobre la organización del modelo de negocios será puesto en tela de juicio cuando los líderes comiencen a escuchar las preocupaciones de los diversos grupos de stakeholders, especialmente los c clientes que compran. Entender las necesidades futuras de los clientes y sus expectativas dará la clave para lograr la resiliencia de las actuales proposiciones de valor.
Ampliar la red. Otras industrias, otros negocios y los medios ofrecen amplia información útil; sin embargo tendemos a concentrarnos más en proveedores con los que estamos de acuerdo que en aquellos que se oponen a nuestra visión. Para combatir la visión miope sobre las posibilidades futuras, los líderes deben ampliar el conjunto de conexiones que cuestionan y dan nuevo forma al pensamiento.
