Para lograr que las tareas que se llevan a cabo resulten amenas y alegres, lo primero que debe ser apasionante, es el trabajo. Y si bien, el entretenimiento y la comunicación no son los principales objetivos laborales, resultan propicios para cumplir con cada una de las obligaciones que arroja el ámbito laboral.
Estudios científicos demuestran que el humor es un estado de ánimo que presenta numerosos beneficios para la salud, las relaciones y la eficacia en trabajo. Según dichos estudios, el buen carácter reduce el estrés, estimula la motivación, fomenta un agradable clima laboral, cohesiona los equipos humanos, potencia la creatividad e incrementa el impacto persuasivo de los mensajes de venta.
La productividad, eficacia y el clima laboral mejoran si el trabajador se encuentra satisfecho y contento dentro de su ambiente. Es por ello que el principal objetivo de las compañías debería ser promover la felicidad de los empleados. A continuación, Trabajando.com expone algunos puntos que pueden resultar de gran utilidad para hacer del trabajo una actividad entretenida, atractiva y placentera.
Fotografías en el puesto de trabajo: Se recomienda decorar el escritorio con fotos de amigos, familia y seres queridos para aumentar la motivación diaria, pero sin extralimitarse para evitar distracciones.
Descanso: Salir a caminar, preparar un café, ingerir algún alimento, conversar temas ajenos al trabajo al menos una vez al día, entre otros, son pequeñas pausas que pueden realizarse durante la jornada. Éstas le permitirán al empleado relajarse, despejar su mente y trabajar con mayor eficacia.
Amabilidad y cordialidad entre los compañeros de trabajo: Mantener una actitud positiva y abierta para cumplir con las tareas asignadas, con el fin de transmitir alegría y generar un clima laboral agradable.
Incorporar las críticas y correcciones de los superiores como buenos consejos para mejorar el trabajo: Si de ellas se logra hacer algo constructivo, la motivación para desarrollar las tareas, se verá potenciada.
Celebrar y festejar fechas importantes: Aniversarios, cumpleaños y otras fechas institucionales deben ser celebrados para generar nuevos espacios de intercambio social entre los empleados.
Aprender nuevos chistes: Realizar bromas a los compañeros para relajar el ambiente y provocar sonrisa entre ellos, sólo de vez en cuando.
Adelantar trabajo: En el caso de haber terminado con las responsabilidades asignadas, aprovechar el tiempo para hacer futuras tareas permitirá sentirse satisfecho y trabajar más relajado los próximos días.
Evitar el estrés: Se debe aprender a manejar todas las situaciones que generen presión en la oficina e ignorar aquellos compañeros que puedan producir malhumor.
Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com Argentina, sostiene: “Muchas veces nos gustaría romper la rigidez que nos rodea en nuestra jornada laboral y no sabemos cómo hacerlo sin que todo se disperse y abandonen las tareas. Sin embargo, una cosa no implica la otra, ya que podemos tomar pequeños recreos, conversar sobre temas que son trascendentes y reírnos un rato para luego volver a las tareas. El trabajo puede ser entretenido y quienes componen las empresas son los protagonistas”.
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