Un mal ambiente laboral puede venir por diferentes circunstancias, un mal jefe que no sabe cómo coordinar el equipo, un compañero que desequilibra el grupo o incluso que existan casos de acoso laboral.
Esta última circunstancia es la más problemática, ya que puede incluso hacer daño a la salud de los trabajadores. Si sufres acoso laboral en algún momento de tu carrera profesional, no dudes en comunicarlo al departamento de recursos humanos, y si no, puedes incluso puedes tomar acciones legales contra esa persona. Es muy importante saber que no hay razones para soportar ese tipo de acosos por mantener el trabajo, ya que puede suponer problemas de salud graves como insomnio, estrés o depresión.
Si te encuentras en un mal ambiente laboral, en el que notas que el equipo no funciona correctamente, pero quieres seguir manteniendo ese trabajo a pesar de las circunstancias. Te damos unos consejos para intentar sobrevivir el día a día en la oficina.
Siempre sé educado, aunque otros compañeros no lo sean. Será mejor enseñarles cómo se hace que unirte a ellos.
Sé responsable de tu trabajo e intenta ayudar a tus compañeros, sin dejar que abusen de ti.
Ante cualquier problema personal, acude a los superiores. En este tipo de ambientes, lo mejor es avisar ante cualquier ataque.
Informa constantemente sobre el trabajo que realizas cada semana o cada día, para que otros no se adjudiquen tus méritos.
Si notas que esta situación te está creando algún tipo de problema en tu vida fuera del trabajo. Plantéate si merece la pena seguir con el empleo.