La pandemia irrumpió en todos los sectores de manera sorpresiva y con distintas consecuencias. En los sistemas de salud el Covid-19 dejó en evidencia la necesidad de inversión en redes de telecomunicaciones y conectividad que les permitan optimizar sus servicios y brindar una mejora de 360º, o sea, desde los médicos hasta los pacientes.
En el mercado argentino varios centros de atención, tanto públicos como privados, mostraron su interés en apostar a la ampliación y modernización de sus redes de conexión. En Furukawa, los proyectos en este segmento se incrementaron muy importantemente durante el 2020, alcanzando despliegues en simultáneo de varios centros de atención médica. Se trata de un área donde la digitalización es un hecho, y llegó para quedarse.
A continuación algunos aprendizajes sobre los beneficios de invertir en infraestructura de red:
- Inversiones: Todos los proyectos de infraestructura de red son con mirada a largo plazo. Se trata de inversiones importantes que se llevan a cabo pocas veces, pero que bien realizadas sientan las bases para alcanzar buenos resultados en la actualidad con la posibilidad de ir actualizando y creciendo según la necesidad lo demande a corto, mediano y largo plazo. Medicina es un rubro dinámico con constante evolución, así que sin duda seguirán evolucionando en el futuro, y se debe estar preparado para eso. Cabe destacar la posibilidad de ampliarse fácilmente a medida que las necesidades de ancho de banda y latencia de los hospitales aumentan con nuevos usos, sin la necesidad de realizar cambios muy importantes de infraestructura.
- Seguridad: La seguridad de los datos y la información es un tema fundamental en todas las áreas. Pero en salud, aún más, se trata de información sensible, en ocasiones confidencial y que requiere de mucha precisión para la toma de decisiones. La seguridad adicional que brinda un sistema basado en fibra óptica a comparación de la vulnerabilidad de otro tipo de cableado se vuelve fundamental en este tipo de segmento.
- Ampliación y mayor alcance: La mayoría de los proyectos comenzaron con la ampliación de infraestructura. Aumentaron la cantidad de puestos de atención conectados lo que fue fundamental en los primeros momentos de mayor afluencia de pacientes. Pero la multiplicación del alcance no queda sólo ahí sino que también se hicieron ampliaciones a otros departamentos como imágenes o diagnóstico digitalizando la atención de manera integral. E incluso a otros Centros de Atención del mismo hospital en una locación distinta o en otra ciudad.
- Atención remota: En tiempos de pandemia, con disposiciones de aislamiento y distanciamiento, infraestructura que permita la atención de manera virtual es clave. La digitalización de la información y el acceso rápido y simple por parte de profesionales y pacientes simplificó en muchos casos el proceso. Además esta modalidad, más allá de un contexto de pandemia, se vuelve útil en casos de pacientes con movilidad reducida o de grandes distancias.
- Los sistemas de salud, con estas nuevas exigencias y desafíos, se vieron ampliamente beneficiados con los avances tecnológicos en conectividad e infraestructura que pueden conseguirse gracias a la opticalización, o sea, la transición para la infraestructura con fibra óptica, que permite modificar por completo la práctica médica y la experiencia de los pacientes.
Así, la fibra óptica se convierte en el medio físico idóneo para las características que requiere la transmisión de datos en un contexto sanitario. La opticalización de la infraestructura hospitalaria, mediante redes PON LAN (Passive Optical Network Local Area Network), ha significado una gran solución en todo el mundo, compuesta esencialmente por Fibra Óptica monomodo en conexiones punto a multipunto.
Asesoró: Denys de Souza Scheiner, Head of Product and Application Engineering for Southern Cone. de Furukawa Electric LatAm