1. Tratar a todos por igual sin importar su contribución sólo generará la ira de la gente más productiva y creativa de la organización.
2. Los verdaderos líderes se hacen a sí mismos accesibles y disponibles para los demás.
3. En general, los expertos poseen más información que capacidad para discernir. Por eso, a menudo se dictan políticas que generan un impacto adverso en la gente, que es la que lucha las batallas del día a día para traer los beneficios a la empresa. Los verdaderos líderes son combativos de cara a estas tendencias.
4. No temer en desafiar o contradecir a la gente. Si un miembro del equipo te dice siempre que sí, entonces, uno de los dos sobra.
5. No descuidar los detalles. Cuando la mente de todos está distraída, el líder debe estar al corriente de lo que pasa. Los buenos líderes delegan a los otros libremente, pero prestan atención a los detalles. El trabajo de un líder no es ser el jefe organizador sino el jefe desorganizador.
6. Los buenos líderes no esperan una aprobación oficial para hacer algo. Al pedir permiso siempre aparece alguien que cree que su trabajo es decir “no”. Entonces, la moraleja es no preguntar.
7. Mirar más allá de las apariencias. No evites hacerlo solo porque no te gusta lo que encuentras.
8. La organización en realidad no logra nada. Los planes no logran nada, las teorías del management no importan mucho. Los esfuerzos tienen éxito o fracasan por la gente que los lleva adelante. Sólo por atraer a la mejor gente, se alcanzan logros importantes.
9. Los diagramas organizacionales y los títulos de fantasía no cuentan, significan muy poco en términos de poder real, que es la capacidad para influenciar e inspirar a los demás.
10. La pregunta más importante en la evaluación de desempeño no es precisamente “¿qué tan bien has desempeñado tu trabajo desde la última vez que nos vimos?” sino “¿qué tanto cambiaste tu desempeño?”.
11. Los líderes rinden honor a sus valores pero son flexibles en cómo los ejecutan
12. El optimismo constante es una fuerza multiplicadora. Los líderes quejosos y culposos generan estos mismos comportamientos entre sus colegas.
13. Entrenar a los miembros del equipo para que tengan integridad, discernimiento, equidad y capacidad para que las cosas se hagan. Los buenos líderes hacen valer la posibilidad de dar su opinión en la fase de reclutamiento.
14. Los grandes líderes suelen ser grandes simplificadores que pueden cortar con sus argumentos los debates y dar una solución que todos puedan comprender. ¿El resultado? Claridad en las intenciones, credibilidad del liderazgo e integridad de la organización.
15. Seguir los instintos desde que se cuenta con un 40 a 70 % de la información, esperar a estar 100% seguros puede hacer que cuando se tome la desición ya sea demasiado tarde.
16. Otorgar el poder y la responsabilidad financiera a quienes traen el dinero a la organización y no a quienes contabilizan o lo analizan.
17. Rodearse de gente que toma su trabajo en serio y trabajan duro.
18. Los mandos están solos. Se puede fomentar la participación e involucramiento del management, pero la esencia del liderazgo es la voluntad de llevar a cabo las más pesadas e inequívocas decisiones que tendrán impacto sobre el destino de la organización.