En un contexto donde los líderes empresariales se muestran resistentes a comprometerse plenamente con la sostenibilidad debido a supuestas desventajas de rentabilidad, surge una llamada a la acción para transformar el panorama empresarial hacia un futuro más sostenible. En ese sentido, la inquietud sobre la velocidad y la confiabilidad de los negocios sostenibles persiste entre los ejecutivos, aunque reconocen los desafíos complejos y costosos que implica mantener el statu quo. Para poder abordar estos desafíos y escalar la sostenibilidad en las empresas, es necesario revisar y transformar el modelo tradicional de negocio en tres aspectos clave: los objetivos, los plazos y los parámetros de éxito.
“La sostenibilidad emerge como un motor de cambio en ascenso. Sin embargo, a pesar de reconocer su potencial para la reinvención empresarial, los ejecutivos están mostrando preocupaciones sobre su impacto en la rentabilidad, lo que refuerza un enfoque estrecho en los resultados financieros a corto plazo. Esta percepción dificulta la justificación de la integración de factores ambientales y sociales en la toma de decisiones empresariales”, comenta Gaetano Salierno, Director de Estrategia y Sostenibilidad de Accenture Argentina.
Datos revelados por Accenture en sus últimas mediciones muestran que el 98% de los directores generales de las empresas reconocen la importancia de hacer que sus empresas sean más sostenibles, pero el 58% aún considera que la sostenibilidad es incompatible con el crecimiento. “Identificamos cinco obstáculos que dificultan la integración de la sostenibilidad en las organizaciones: complejidad, costo, rapidez, confiabilidad y practicidad. Si bien, la adopción de la sostenibilidad se percibe como lenta y poco práctica, se reconoce que mantener el statu quo es más complejo y costoso, generando así vientos a favor para promover su adopción”, complementa Salierno.
En ese sentido, Accenture revela a partir de sus estudios que los futuros líderes demandan tres cambios fundamentales en los modelos de negocio tradicionales para integrar el impacto ambiental y social en la toma de decisiones: propósito generalizado, horizontes más amplios y valor de 360°. La fusión de estos criterios es esencial para crear valor sostenible a gran escala. “La tecnología y el talento son motores clave para la transformación sostenible. Las empresas deben construir un núcleo digital sólido y aprovechar nuevas tecnologías para generar innovación sostenible”, cierra Salierno.