El volumen de compras de productos de consumo masivo fue negativo en un 2,2% -en el acumulado del 2014-, con una caída mayor en el último semestre marcando un año de inflexión y cambio en el que por primera vez el consumo masivo se contrajo desde 2003, según indica el análisis Consumer Insights que realiza Kantar Worldpanel.
Las categorías lácteos y cuidado personal son las que presentaron las mayores bajas. En los niveles sociales medio bajo y bajo superior se observaron los ajustes más importantes; mientras que las regiones de central y Cuyo + Noa (*1) fueron las más perjudicadas.
Además, se destaca un incremento de un 2% de la cantidad comprada en cada visita a los canales, con una desaceleración marcada en comparación a años anteriores. También se observa una disminución de un 5% de la frecuencia de compra, lo que evidencia que los shoppers están tratando de no tentarse ni gastar por encima de su capacidad.
“Si la coyuntura y el contexto son similares al año pasado, se puede inferir que el consumo masivo se mantendrá estancado este año, pero con nuevas oportunidades para el desarrollo de segmentos o categorías de mayor valor, que ya sufrieron un fuerte ajuste durante el 2014”, explican desde la Kantar Worldpanel.
“El desafío para los productos más básicos de la canasta será afianzar el vínculo del consumidor con las primeras marcas; ya que continuarán creciendo canales y opciones de menor valor, y la necesidad de liberar presupuesto para “otros gastos” puede poner en riesgo la lealtad de los shoppers”, destaca Juan Manuel Primbas, Country Manager de Kantar Worldpanel.
Como uno de los hábitos más preocupantes aparece la nueva disminución en las veces que los argentinos salen a comprar, lo que obligará a la industria a repensar estrategias para atraer y estimular momentos de impulso en el consumidor.