Page Personnel, compañía perteneciente al Grupo Michael Page International especializada en el reclutamiento de jóvenes profesionales, analistas y niveles de coordinación inicial, anunció que la tendencia que predominará en las empresas durante los próximos meses será la figura del líder sustituyendo al del jefe tradicional.
El “liderazgo” es el conjunto de capacidades que una persona tiene para influir en un grupo de personas determinado, haciendo que este equipo trabaje con entusiasmo, aunque la realidad sea diferente, en el logro de metas y objetivos. También se entiende como la capacidad de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un grupo o equipo para alcanzar un objetivo de forma eficaz y eficiente.
Según los ejecutivos de la compañía, la Generación Y, comprendida por aquellas personas nacidas en marco del desarrollo de la globalización entre 1982 y 1994, son una generación comprometida con sus responsabilidades, pero que necesitan estar motivadas y comprometidas para cumplir con sus objetivos. Por esta razón, le demandan a su superior conocer las tareas, además de poseer un perfil carismático y competitivo para tener en quien proyectarse. Esto se contrapone con lo que pasaba con la Generación X, que generalmente veían el crecimiento vertical en una compañía, desarrollando su carrera profesional en una empresa por largos años hasta asumir un cargo gerencial.
“El líder debe tener presente que la eficiencia del equipo depende del compromiso y el cumplimiento de los objetivos como equipo, y entender y desarrollar la sinergia entre las habilidades de sus miembros, más que depender de la simple suma de estas habilidades individuales. Debido a esto, es muy importante que el líder sepa ganarse rápidamente la confianza de los empleados, que los entienda, para saber como motivarlos y lograr retener a los talentos, en un contexto donde la rotación es frecuente”, señala Miguel Carugati, Executive Manager de Page Personnel Argentina.
Por esto, debe ser una persona con carácter pero con quien se pueda dialogar, alguien que posea principios y ética. Debe conocer el trabajo y las habilidades necesarias para llevarlo adelante, pero también entender el negocio y sus exigencias, y tener la capacidad de convencer a los empleados para que realicen las tareas, siguiendo una determinada metodología, sabiendo tomar las decisiones en tiempo y forma. Asimismo, se tiene que interesar por las personas de su equipo y que éstas se sientan valoradas, lo que aporta al desarrollo personal y del equipo.
“Los empleados ya no quieren un a jefe tradicional autoritario, sino que buscan un líder. Para gerenciar a la Generación Y, se debe demostrar quién es, cómo se desenvuelve en el día a día y cómo supera los imprevistos”, explica el ejecutivo.
El perfil de líder debe ser potenciado desde la compañía; vale decir, que la empresa debe buscar al líder en su interior probando al candidato ante diferentes situaciones, dándole las responsabilidades y autonomía para que comience a desenvolverse en su rol como líder.
“Para formar a un líder existen diferentes metodologías de capacitación, como el coaching o el acompañamiento de algún directivo a un perfil con potencial en su etapa inicial en la organización. Además, existen determinados cursos de liderazgo, formación académica, MBAs y programas de desarrollo directivos para complementar la formación”, aclara Carugati.
Tanto en las empresas nacionales como multinacionales se está valorando cada vez más a este tipo de profesionales, ya que son talentos claves para el crecimiento del negocio y la motivación de los empleados, pudiendo alcanzar o superar los objetivos pautados.