Un equipo de investigadores de los Estudios de Ciencias de la Información y Comunicación de la UOC (España) reveló a partir de un estudio que varias clínicas de fertilidad alrededor del mundo venden el congelamiento de óvulos de maneras engañosas a través del marketing, generando en algunos casos falsas expectativas en sus clientes que quieren ser padres a toda costa.
Algunas clínicas, explican, se basan en la lógica del marketing y no necesariamente de la salud de los clientes, por tanto en lugar de dar información objetiva a las mujeres las alienta a congelar óvulos ante la necesidad de tener hijos en en el corto o largo plazo.
Los webs son una de las principales vías para captar clientas y, según denuncia la investigadora Leila Mohammadi, presentan la congelación de óvulos como “el único avance tecnológico que permite solucionar el dilema del retraso de la maternidad, como una opción de libertad ante otras alternativas”.
Mohammadi reconoce que uno de los motivos que la ha llevado a ahondar en este tema es la preocupación por la mercantilización de la maternidad causada por problemas estructurales sociales. Junto con los investigadores del grupo Daniel Aranda y Silvia Martínez-Martínez, ha analizado 19 webs de centros de fertilidad de un total de 100 seleccionados mediante un buscador especializado en centros de salud y Google.
Según los investigadores, de los mensajes webs se desprende la voluntad de “crear una conexión entre las tecnologías de congelamiento de óvulos y los obstáculos sociales que encuentran las mujeres en la sociedad actual de consumo neoliberal” por lo cual es “ideal” según las webs, congelar óvulos, preservarlos y luego ser madre cuando cada una lo desee y hasta utilizan la palabra “índices de éxito” como método de venta.
La información que se exhibe como gancho, lamentan los investigadores, “no tiene fuentes científicas y, en lugar de proporcionar la información necesaria para clientes potenciales, está formulada para atraer a las mujeres a comprar los servicios que ofrecen”.
En las páginas se relatan las tasas de éxito pero no detallan cómo se calcula ni cómo es el proceso complejo de congelación de óvulos además de lo costoso que es mantenerlos congelados por una incierta cantidad de años.
Por esto, Mohammadi advierte que la información que presentan las clínicas no es suficiente para tomar la decisión correcta en un tema tan delicado y que, además, «este tipo de mensaje puede llevar al engaño de la mujer en el proceso de toma de decisiones».
Al final de la investigación, la investigadora aclara: “Poner el acento en un proceso como este traslada toda la responsabilidad sobre los individuos y especialmente en la mujer. La maternidad es una responsabilidad no solo individual sino colectiva, y los desafíos sociales relacionados con ella deben resolverse con soluciones sociales e introduciendo cambios en el mercado laboral, en los servicios públicos y en la concepción de la institución familiar”.
Fuente: Urgente24
