Ford reinventó la rueda para el nuevo Mustang Shelby® GT350R con ayuda de la tecnología utilizada en el trasbordador espacial. Con fibra de carbono (el material más novedoso de alto rendimiento), Ford y Carbon Revolution tomaron el desafío de fabricar las llantas en forma masiva.
Las llantas, primeras en su tipo, permiten un gran ahorro de peso. En pruebas tempranas con vehículos de referencia, mostraron un potencial significativo mejorando la respuesta de la suspensión, dinámica del chasis, sensación de la dirección y calidad de manejo. Cuando se tomó la decisión de usar esta tecnología en autos de producción, el equipo de ingenieros desarrolló una llanta que conjuga los estrictos estándares de Ford respecto de durabilidad, calidad, trabajo artesanal y acabado premium.
El porqué de la fibra de carbono
La reducción del peso general es beneficioso para la dinámica de un vehículo pero la reducción en el peso no suspendido (los componentes no sostenidos por la suspensión) puede tener un impacto significativo en la conducción y su rendimiento. Menos peso suspendido ayuda al vehículo a salir desde el punto de detención, a frenar a cero y a girar más rápido con la reducción de la inercia rotatoria de la rueda, lo que mejora drásticamente la respuesta que recibe el conductor. Además, esta disminución de peso se traduce en que los componentes de la suspensión no tengan que trabajar tan duro para mantener las cubiertas en contacto con la calle sobre superficies onduladas o en mal estado.
Una innovación significativa fue necesaria para poder alcanzar las necesidades del Shelby GT. Este proyecto marcará un nuevo estándar para la producción en masa de las llantas de fibra de carbono.
Las llantas del Shelby están diseñadas para ser rígidas, ligeras y resistentes. Otros tipos de llantas pueden ser rígidas y ligeras, pero la resistencia es una característica propia del tipo de resina de la fibra de carbón.
Ford dispone de muy altos requerimientos en los testeos de calidad para sus llantas que deben soportar curvas peligrosas y exposición a los rayos UV, a los químicos y al calor extremo. Para pasar a producción, las llantas del GT necesitaron superar todas estas demandas. Una de las pruebas más severas para comprobar la eficacia del bajo peso en suspensión consistió en tomar una curva a alta velocidad, un test que, sin el diseño adecuado, puede causar un serio daño tanto en la llanta como en la cubierta.
Durante las pruebas de pista, las habilidades extremas de rendimiento del sistema de freno requirieron la máxima tecnología disponible por Carbon Revolution. Cuando se midió la temperatura de los frenos ultra potentes del Shelby, se reveló que alcanzan temperaturas que superan los 900°C. Como resultado, el diseño de las llantas fue evolucionando desde una rueda convencional de ruta hasta llantas térmicas de mejor desempeño para autos de carrera.
Por décadas, las compañías aeroespaciales han tratado la alta temperatura de las aspas de las turbinas con tratamientos cerámicos para mejorar la durabilidad. Esta tecnología se aplica también en autos de carreras. Un sistema de recubrimiento térmico desarrollado por Carbon Revolution utiliza esta misma tecnología con múltiples etapas y materiales que provee una excelente barrera térmica.
“Las llantas y cubiertas del Shelby fueron desarrolladas para ser las más capaces en la pista que jamás hayamos producido” dijo Adam With, supervisor de chasis de Ford Performance. “Las llantas de fibra de carbono reducen 27 kg de peso del vehículo en comparación con el aluminio y son más rígidas ofreciendo una mejor respuesta a la dirección. Creemos que esto es un cambio del juego en la industria” agregó. “Un gran ejemplo del desempeño que hemos mejorado a través de la innovación” concluyó.