El negocio incluye la adquisición de las marcas Navarro Correas y San Telmo, además de plantas de producción y viñedos en el país.
Grupo Peñaflor, la compañía dueña de marcas como Trapiche y Alta Mora, se quedó con el negocio que uno de los mayores productores de bebidas alcohólicas tenía en la Argentina. Así, la empresa argentina se quedó con los vinos Navaro Correas y San Telmo, antes propiedad de Diageo Plc. El grupo británico que abandona el país es propietario de algunas de las etiquetas más reconocidas en el universo de las bebidas blancas. Entre ellas están Smirnoff, Johnnie Walker, Captain Morgan, Cuervo, J&B, y es también dueña del licor Baileys, entre otras marcas.
La transacción incluye además el traspaso de plantas de producción y viñedos que Diageo tenía en el país. A su vez, la empresa del Reino Unido informó que será exclusivamente el Grupo Peñaflor quien distribuya su catálogo de marcas de licores internacionales en toda la región. Con esta venta, Diageo planea registrar una pérdida excepcional antes de impuestos por U$S 91,40 millones.