Hace unos días aparecieron los primeros rumores de que la Unión Europea iba a dar su aprobación a la venta de Red Hat a IBM. Y ya la ha dado. IBM ya cuenta con la autorización necesaria de la Unión Europea para comprar Red Hat. Además, según un comunicado de la propia UE, ha recibido el visto bueno sin ninguna condición para la operación, por lo que no tendrá que tomar ninguna medida al respecto.
Al parecer, la UE ha llegado a la conclusión de que la operación no supone ningún impedimento para la competencia. Hasta llegar a ella, la UE ha investigado las implicaciones que podría tener la operación. Por ejemplo, en el sector del software de middleware e infraestructura de sistemas, donde las actividades de IBM y Red Hat se solapan. Pero la Comisión Europea ha decidido que no supone un problema, puesto que tras la compra, la compañía resultante seguirá enfrentándose a una competencia significativa por parte de terceros en todos los mercados en los que operan o pueden hacerlo.
La Comisión también ha valorado, entre otras cosas, los riesgos de que se debilite la competencia si IBM o Red Hat aprovechan sus posiciones para operar en mercados vecinos. En particular, si IBM podría rebajar la competitividad de las ofertas de sus rivales degradando su interoperabilidad con el principal producto de Red Hat, Red Hat Enterprise Linux. Pero según las conclusiones a las que ha llegado la comisión, la entidad resultado de la operación no tendría el poder de mercado suficiente para acabar con sus competidores o marginalizarlos degradando la interoperabilidad.
Además, dado que el éxito ed Red Hat se basa significativamente en su neutralidad, cualquier estrategia que rebajase esta neutralidad lo que haría probablemente sería dañar el negocio de Red Hat. Los clientes buscarían entonces otras opciones, lo mismo que los desarrolladores y los parnets, entre el resto de soluciones open source.
Sucedería lo mismo si la entidad resultante dificultase el acceso al código fuente de Red Hat o intentase influir en el desarrollo de determinados proyectos open source para que sus productos lo tengan más sencillo en el mercado. Todo afectaría negativamente a los productos de Red Hat.
Por estos motivos, entre otros, la comisión ha llegado a la conclusión de que esta operación de compra no ocasionaría problemas a la competencia en ninguno de los mercados a los que afecta la compra. Así, y dado que IBM ya contaba con la autorización del organismo estadounidense encargado de la vigilancia de la competencia, ya puede iniciar la operación, con la que se hará con Red Hat por la nada despreciable cantidad de 34.000 millones de dólares en efectivo.
Fuente: Muy Computer Pro