Llegar al verano sin sobrepeso suele ser una de las principales preocupaciones que tienen tanto hombres como mujeres a esta altura del año. Los gimnasios comienzan a llenarse y las visitas a médicos y nutricionistas se convierten en la moneda corriente para lograrlo.
Gracias a numerosas investigaciones se han descubierto propiedades en algunos alimentos naturales los cuales ayudan y complementan una dieta sana para bajar de peso.
Uno de ellos es la espirulina, un alimento perteneciente a la familia de las algas verde azuladas que se encuentran en el mar y en algunos lagos de agua dulce. Se la utiliza como una fuente dietética de proteínas, de vitaminas B y de hierro la cual ayuda en el proceso de perder peso, aumentar la energía, el metabolismo y para mejorar la digestión. Los nutricionistas la recomiendan por su riqueza en clorofila, vitamina B, Omega 6, betacarotenos y minerales como calcio, hierro, magnesio, manganeso, potasio y zinc.
Además, los especialistas la aconsejamos como el complemento ideal en las dietas de los vegetarianos y como un refuerzo importantísimo a la hora de prevenir enfermedades y aumentar las defensas ya que mejora el sistema inmunológico debido a sus antioxidantes. También reduce el colesterol gracias a su alto contenido de ácido gamma-linolénico y de niacina, mejora la flora intestinal y previene las infecciones intestinales. Su ayuda para bajar de peso y estar en excelente forma este verano radica en su acción saciante en el estómago por las fibras que se hidratan y se hinchan, haciendo que la comida quede más tiempo en el estómago.
Otro de los alimentos naturales de alta calidad que se recomienda para ayudar en el descenso de peso es el té verde, una verdadera fuente de nutrientes y antioxidantes. Se le han concedido múltiples beneficios como, por ejemplo, la mejoría de la astenia (falta de fuerza física o muscular), de la celulitis y del sobrepeso, entre otros.
Como se dijo anteriormente, la espirulina representa un valioso suplemento dietario debido a su excelente valor nutricional y su perfil de seguridad en relación con el consumo. Por su parte, al té verde también se le han concedido múltiples beneficios para bajar de peso y disminuir la tan temida piel de naranja o celulitis. Tanto la espirulina como el té verde pueden consumirse naturalmente: en polvo en el caso de la espirulina o como infusión, en el caso del té verde. Pero, en el primer caso, como el alga tiene un olor muy fuerte y algo desagradable, es necesario mezclarla con jugos de frutas o vegetales. Por el lado del té verde, son 6 las tazas diarias -como mínimo- que habría que consumir para que cumpla el efecto deseado. Por lo cual, ambas ingestas de ese modo son poco prácticas.
Por eso, actualmente existen en el mercado, productos que combinan espirulina y té verde en una sola cápsula y que son de práctica y fácil ingestión. Son de venta libre en farmacias y dietéticas y contienen la dosis justa diaria y necesaria para mantenerse en forma además de sanos.