Se acerca la época de verano, y tanto hombres como mujeres, se ponen en campaña para sacarse de encima los rollos y kilos demás. Un método muy solicitado es la Lipoaspiración: pero es muy importante informarse bien antes de iniciar este tratamiento y evitar decisiones equivocadas, en el apuro de querer mejorar la figura.
En primer lugar, la lipoaspiración no es un tratamiento de obesidad. Sino que consiste en una cirugía que se realiza por medio de cánulas y a través de pequeños orificios, con el objetivo de aspirar grasa localizada en distintas zonas (como abdomen, flancos, caderas, cara interna de muslos, rodillas, papada, etc.) y de ésta manera poder modelarlas.
La lipoaspiración sirve para modelar y no para bajar de peso. Lo que buscan, tanto hombres como mujeres, es mejorar las zonas donde se encuentran esas “adiposidades molestas” localizadas, que no se eliminan con dietas ni gimnasia.
En el caso de las mujeres, la Lipoaspiración es la cirugía más solicitada, junto con el aumento mamario. En el caso de los hombres, en el último tiempo, también ha crecido considerablemente el número de consultas y cada vez es mayor la cantidad de hombres que se animan a operarse. La cirugía más solicitada por ellos es la lipoaspiración de abdomen y flancos (los famosos “flotadores”). De los pedidos en hombres, aproximadamente un 40% es por este motivo.
Si bien no hay una edad determinada, generalmente entre los 20 y 30 años comienzan las consultas. Los pacientes más jóvenes tienen una mejor elasticidad en la piel y pueden llegar a obtener mejores resultados.
Lo ideal es informarse bien con un profesional antes de decidir optar por una lipoaspiración, y tener en claro que ésta a su vez, debe combinarse con un correcto Plan alimentario y actividad física acorde a las necesidades de cada paciente. Y si el objetivo es llegar bien al verano, hay que tener en cuenta el período post operatorio, ya que luego de esta cirugía, además de algunas molestias, aparecen moretones que se van con el tiempo. Adicionalmente, los pacientes deben utilizar una faja compresiva durante 30 días.
La lipoaspiración o lipoescultura es una cirugía que no presenta demasiados riesgos, pero debe realizarse sí o sí en un quirófano, con un anestesista, por un cirujano plástico y presentando los estudios pre quirúrgicos en orden.