Durante años, el pacto entre anunciantes y consumidores parecía claro: los primeros ofrecían contenido gratuito a cambio de aceptar publicidad. Sin embargo, este acuerdo está llegando a un punto crítico. La saturación publicitaria, combinada con la falta de relevancia y el carácter intrusivo de los anuncios digitales, ha generado frustración entre los usuarios, marcando un antes y un después en su relación con las marcas.
¿Qué está ocurriendo con la publicidad digital?
Según un informe de Eyeo y Harris Poll, la paciencia de los consumidores se agota. De los más de 2.000 encuestados, el 73% de los usuarios de computadoras identifica los anuncios como su mayor molestia al navegar en línea, superando incluso preocupaciones como la seguridad y la privacidad de datos. Además, casi un 90% desea límites claros en la cantidad de anuncios y un mayor control sobre ellos.
“La publicidad digital se ha convertido en un juego interminable de esquivar anuncios, donde el consumidor siempre pierde”, comentó Wittek, portavoz de Eyeo.
A pesar de la promesa de ofrecer publicidad relevante y no intrusiva, los avances en este sentido han sido limitados. En cambio, los anunciantes han optado por incrementar el volumen de anuncios para contrarrestar el creciente uso de bloqueadores, que aumentó un 11% entre 2022 y 2023.
Los consumidores: entre la frustración y la aceptación
Aunque el rechazo a los anuncios es alto, un informe de Hub Research arroja un dato interesante: el 66% de los televidentes en Estados Unidos prefiere ver anuncios en plataformas como Netflix y Amazon Prime Video para ahorrar dinero. Sin embargo, esto no significa que la publicidad en estas plataformas sea efectiva, pues muchos usuarios ignoran los anuncios o los consideran irrelevantes.
Esta dualidad evidencia que los consumidores no rechazan completamente la publicidad, pero sí exigen que sea más respetuosa y relevante.
¿Quién debe liderar el cambio?
El estudio de Eyeo también señala que los consumidores esperan que actores clave, como Apple, Samsung, y las plataformas tecnológicas, lideren el cambio hacia un ecosistema publicitario más equilibrado. Sin embargo, este proceso requiere la colaboración de todos los involucrados: anunciantes, marcas y desarrolladores tecnológicos.
“Los consumidores esperan un esfuerzo conjunto para crear una experiencia publicitaria que sea justa y funcional para todos”, concluyó Wittek.
Un futuro incierto para la publicidad digital
La industria publicitaria está en un punto de inflexión. Si no se replantea el modelo actual, corren el riesgo de perder la confianza del público. Las marcas deben adoptar un enfoque centrado en el usuario, ofreciendo anuncios menos invasivos, relevantes y respetuosos. La clave estará en entender que menos, muchas veces, es más.
Fuente: Puro Marketing