El cumplimiento de los objetivos de toda organización, sea del carácter que sea, requiere de sinergia entre todos sus sistemas y elementos para así optimizar los esfuerzos realizados. Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las organizaciones, es la disparidad que existe entre la estrategia empresarial y los sistemas de recursos humanos, es allí cuando el alineamiento estratégico se hace importante, el mismo, consiste en alinear el recursos humano y su entorno con la estrategia propia de la organización, este ejercicio tiene la finalidad de generar beneficios múltiples, como lo son el logro de objetivos planteados y el mejoramiento del clima y cultura organizacional.
El paso inicial para que la organización conceptualice adecuadamente su estrategia es aclarar e internalizar quienes son, cuáles son sus valores, que quieren ser, razón de su trabajo, a donde quieren llegar y como deben lograrlo, posteriormente y no menos importante es la asignación de recursos, ya que, el equilibrio entre el alineamiento de la estrategia y los recursos hará posible su éxito y perdurabilidad y crecimiento a lo largo del tiempo; es importante aclarar que aunque el recurso es imprescindible, una abundante fuente de financiamiento no necesariamente es la clave del éxito, se podría disponer de la más alta tecnología y de personas con los marcos de competencias adecuados, pero si se carece de una adecuada estrategia, no se obtendrá algo diferente al fracaso; de igual manera, una estrategia bien concebida, sin los recursos y competencias requeridos para implementarla, sólo será un buen ejercicio teórico, sin ninguna validez práctica.
En resumen, la clave del éxito está en disponer de forma armónica y sinérgica todos los elementos de una organización: estrategia, personas y recursos, llevando a cabo sólo actividades que generen valor agregado y que sean claves para el logro de objetivos específicos y compartidos.