Existe un desajuste entre la oferta y la demanda de talento: “el desempleo es alto y aumenta, mientras que los empleadores tienen dificultades para cubrir puestos clave. Las encuestas indican que los técnicos e ingenieros ocupan el primer lugar dentro de los puestos más difíciles de cubrir”, explica Bernardo Hidalgo, titular de la consultora especializada en desarrollo de personal Hidalgo & Asociados.
Las industrias vinculadas al sector petrolífero son las que tienen mayor dificultad para cubrir las posiciones de trabajo; a su vez las automotrices y autopartistas reflejan una reducción en la incorporación de personal. Por su parte, la industria farmacéutica y el área tecnológica muestran mayor estabilidad.
Según una encuesta realizada este año en CABA y GBA, el 18% de las empresas planea hacer reducción de plantilla (contra un 12% del año anterior) y un 22% tiene proyectos de aumentarla (contra un 34% del año anterior). Hidalgo detalla que el origen de las búsquedas responde a reemplazos de vacantes existentes y que mientras disminuyen los puestos en empresas líderes, aumentan en el mercado marginal.