Porsche AG estableció nuevos récords de entregas, ingresos y resultado operativo en el ejercicio fiscal 2017. En todo el mundo fueron vendidos 246.375 autos, un cuatro por ciento más que el año anterior; la facturación creció cinco por ciento para alcanzar los 29.010 millones de dólares (23.500 millones de euros), y el beneficio operativo incrementó siete por ciento para alcanzar los 5.061 millones de dólares (4.100 millones de euros. 2016: 3.900 millones de euros). Como resultado de ello, el margen de beneficio sobre las ventas subió de 17,4 por ciento en 2016 a 17,6 por ciento del pasado año. A finales de 2017, Porsche tenía 29.777 empleados, lo que representa un aumento de 8 por ciento en comparación con el año anterior.
“Estos exitosos resultados financieros confirman nuestra estrategia. Estamos utilizando nuestro alto nivel de ingresos para apoyar un plan de desarrollo futuro sin precedentes”, dijo Oliver Blume, Presidente del Consejo Directivo de Porsche AG, en la conferencia de prensa anual realizada hoy en Stuttgart. Además de hacer grandes inversiones en su negocio principal de vehículos deportivos, Porsche también está duplicando sus gastos en las tendencias de futuro, con un compromiso de invertir cerca de 7.500 millones de dólares (más de seis mil millones de euros) en electromovilidad hasta 2022. El dinero se invertirá en derivados del Mission E, hibridación y electrificación de la gama actual, así como en desarrollar una infraestructura de carga y una movilidad inteligente.
“Hemos logrado impulsar nuestro resultado operativo en más de 50 por ciento en los tres últimos años”, dijo Lutz Meschke, Vicepresidente del Consejo Directivo de Porsche AG y Miembro del Consejo Directivo responsable de Finanzas y Tecnologías de la Información. “Con un margen de beneficio de 17,6 por ciento, Porsche continúa estando entre los fabricantes de automóviles más rentables del mundo. Esto se debe a las continuas mejoras en productividad, a nuestra estrategia de manejo riguroso de costos, así como a la excelente gama de productos”.
Digitalización, electrificación y conectividad son los retos principales que requieren una inversión sustancial. “Sin embargo, tenemos claro que debemos mantener un retorno estratégico de al menos 15 por ciento”, dijo Meschke. “Debemos generar y generaremos un crecimiento potencial en torno al actual negocio de vehículos. A medio plazo, queremos generar un porcentaje de doble dígito de las ventas por medio de los servicios digitales”.
Meschke tiene una visión optimista: “Nuestro objetivo para 2018 es estabilizar los ingresos y entregas en estos niveles altos”. Porsche espera un próximo impulso en las ventas cuando llegue al mercado el Mission E, el primer vehículo ciento por ciento eléctrico del fabricante de deportivos de Stuttgart.
También hay en marcha planes para derivados del Mission E: hace apenas una semana, Porsche presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra un prototipo listo para entrar en producción, el Mission E Cross Turismo. Este Cross Utility Vehicle (CUV) de propulsión eléctrica tiene una potencia total de más de 600 caballos (440 kW), una autonomía superior a los 500 kilómetros y acelera de 0 a 100 km/h en menos de 3,5 segundos. Aproximadamente, el tiempo de carga es de cuatro minutos para recorrer 100 kilómetros.
Para los próximos diez años, Porsche tiene la intención de continuar su apuesta sobre tres pilares: incorporando motores de combustión optimizados, modelos híbridos enchufables y deportivos ciento por ciento eléctricos, por supuesto, todo con el estilo típico de la marca. “Las regiones del mundo se están desarrollando a ritmos diferentes. Por eso nos estamos preparando para tener la mayor flexibilidad posible en este periodo de transición”, dijo Blume.
Porsche también desveló en Ginebra el 911 GT3 RS. “El GT3 RS lleva el motor atmosférico más potente de los que ofrece Porsche”, dijo Oliver Blume. El nuevo deportivo de altas prestaciones cuenta con un motor de cuatro litros de cilindrada que entrega 520 caballos de potencia (383 kW), lo cual le permite acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 3,2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 312 km/h. Tras los lanzamientos de los 911 GT3 y 911 GT2 RS, con esta última incorporación Porsche presenta su tercer GT homologado para carretera en el plazo de un año.
Blume también enfatizó el papel de Porsche en la sociedad: “Nunca hemos visto nuestro éxito económico de forma aislada. También hemos tenido siempre un foco claro en los aspectos no financieros del negocio, en nuestra responsabilidad social. No vemos conflictos entre aspectos económicos, ecológicos y sociales. Todos tienen que funcionar de forma armoniosa entre sí”.
Blume citó el tema de la formación a modo de ejemplo. En 2017, 230 jóvenes iniciaron su formación en Porsche. Con el lanzamiento del Mission E, el fabricante de vehículos deportivos tiene previsto incrementar de nuevo el número de personas para formación técnica, de los 106 actuales hasta 156 en el futuro. En total, en Porsche hay disponibles alrededor de 750 plazas para formación. A través del año de integración para refugiados y del año de preparación, Porsche permite tener títulos básicos a solicitantes que tendrían pocas oportunidades según los criterios generales de selección. Jóvenes socialmente desfavorecidos de Sudáfrica, Filipinas y, desde 2018, México están siendo preparados como parte de una colaboración con Don Bosco.
Por medio de donaciones que ascienden a cerca de 7,5 millones de dólares (más de seis millones de euros), Porsche apoyó en 2017 más de 200 iniciativas que benefician al medio ambiente, así como a proyectos sociales, culturales, deportivos, educativos y científicos. El fabricante de vehículos deportivos también patrocina instalaciones culturales y deportivas regionales, entre las que se incluyen el Ballet de Stuttgart, la Orquesta Gewandhaus de Leipzig y el proyecto para jóvenes atletas ‘Turbo para Talentos’.
El negocio sostenible también juega un papel importante en la actividad empresarial principal: desde enero de 2017, Porsche AG utiliza ciento por ciento energía verde. Además, la compañía está transformando su transporte logístico por ferrocarril en un proceso completamente neutro de carbono. En 2017, una vez más Porsche recibió múltiples premios internacionales por la fabricación sostenible. La empresa lleva a cabo sus propias auditorías internas para garantizar que sus proveedores implementan los altos requisitos que garantizan la sostenibilidad. Además, la compañía intenta producir el Mission E utilizando un proceso neutro de CO2.