Los usuarios cada vez son más exquisitos y demandan determinadas cosas, de acuerdo con sus gustos y necesidades. Por ello, las diferentes webs quieren ofertar servicios acorde con las exigencias de todos ellos. Sin embargo, no todo lo que reluce es oro, pues esto no es gratis, tiene un precio. Así, nace la opción premium, una característica que ofrece una mayor gama de contenidos y, además, es una alternativa de las compañías para aumentar los ingresos.
Pero las empresas no pretenden relacionar esta opción con determinados usuarios exclusivos, sino que representan cómo el mercado atiende a la demanda para ser más competitivo. “Adaptarse a las tendencias de consumo y a la sociedad multipantalla”, han señalado desde Netflix. Por su parte, desde LinkedIn Talent Solutions Iberia aseguran que con su servicio premium lo que buscan es “dar una ventaja competitiva”, no exclusividad.
Nos encontramos ante un usuario que cada vez pide más, aunque no todas las empresas centran su estrategia en el consumidor. Por ejemplo, en el portal de ventas eBay se han orientado a los vendedores profesionales para acompañar a las tiendas en su salto al ecommerce y mejorar su visibilidad.
Pero, a pesar del magnífico servicio premium que muchas compañías ofrecen, la mayoría de ellas crecen por su servicio gratuito o más barato, ya que hay algunos usuarios que se conforman con lo que hay opinando que es suficiente y que no hay necesidad de pagar más.
Pero las compañías insisten, con poco dinero se obtiene más calidad en el servicio. A estos usuarios que solicitan la opción premium se les llama Heavy Users, y son aquellos que “hacen un uso intensivo y buscan una experiencia superior”.
Por ello, parece que el premium se va a ir democratizando cada vez más, aunque la eterna duda es qué estrategias tomarán las diferentes compañías para diferenciar al usuario.
Fuente: Marketing Directo