El Polo IT Buenos Aires realizó, recientemente, el evento más grande del año que haya reunido a la industria IT de la ciudad y AMBA.
En ese marco, donde se compartieron experiencias buscando potenciar el trabajo de cooperación entre las pymes, también se trató un tema que preocupa a la industria de TI: el impacto de la inflación sobre el funcionamiento de las empresas.
Los siguientes son testimonios de miembros activos de la entidad y máximos responsables de sus empresas.
Según Marcelo Di Chena, Prosecretario del Polo IT de Buenos Aires y socio de MasterSoft, para entender el impacto de la inflación en las empresas de tecnología, es importante entender como es el entramado de las empresas del sector. Y para eso nada mejor que el Monitor TIC que elabora el Polo IT en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Económico del GCBA. Según esta herramienta – que se basa en datos estadísticos fehacientes – más del 90 % de las empresas TIC son empresas de menos de 50 empleados y más del 80 % de la facturación del sector corresponde a Ventas en Mercado Local.
En opinión de Pablo Fiuza, presidente del Polo IT de Buenos Aires y socio de Qservices: “La mayoría de nuestro sector es pyme y vende en el mercado local. Como tal no tiene siempre suficiente poder de negociación para trasladar a precios sus costos. Esta realidad y la sobredemanda de talento hace que los costos sigan aumentando por encima de los ingresos generando riesgos a la sostenibilidad de muchas compañías. En la última encuesta realizada por el Polo IT, más del 40 % de las empresas manifestaron que el ajuste de sus tarifas era inferior al índice de precios al consumidor”
Vinculando la cuestión a los talentos y las dificultades que existen para retenerlos, Alvaro Pereira Paz, CEO de Lightech explico “Desde Maslow y su pirámide en adelante, sabemos que ser el mejor lugar para trabajar no nos alcanza si no podés pagar el aumento del alquiler. La aceleración de inflación con retraso sostenido del dólar hace que los plazos contractuales de ajuste hayan quedado cortos y los ingresos en dólares valgan cada vez menos. En este contexto, retener al capital humano en empresas de tan alta especialización como la ciberseguridad requiere mucha creatividad en beneficios, compensaciones y planificación fiscal de la empresa y del empleado. Mientras sea ético, legal y paguemos todos los impuestos, buscamos todos los medios para navegar esta sucesión de tormentas que nos toca.”
Por su parte, Marcelo Pires Nabais, socio de Gestión IT analizó que “la mayor complicación con la inflación es que de alguna forma con los salarios mucho no nos podemos alejar, pero del lado de los clientes, los ajustes vienen más lentos, al menos nuestros clientes no firman ajustes automáticos sino revisiones por trimestre, cuatrimestre o semestrales.
Por lo que acabo de explicar, lo peor en realidad son los aumentos bruscos en la tasa de inflación. Son más graves que la inflación alta permanente, ya que cualquier valor previsto te deja mal ante un aumento durante el transcurso del contrato”
Todas estas variables, empujan a las pymes a trasladar el incremento de los costos a los precios de productos y servicios. “La empresa debe implementar un plan estratégico de incremento de sueldo para todos sus colaboradores. Dicho incremento se basa en el índice inflacionario del país, como manera de motivar la continuidad laboral. En función de ello, los costos finalmente deben trasladarse a los clientes o negociar los contratos respectivos en valor dólar”, amplía Pablo Gudiño, CEO de Openix.
Finalmente, Maximiliano Roa, vicepresidente del Polo IT y socio de ITRIS afirmó: “En general el sector plantea incrementos de salarios frecuentes (revisiones semestrales o trimestrales), y generalmente los índices están en la misma línea de la inflación. De todos modos, existen ciertos perfiles que no son accesibles al mercado local. Esto genera que las empresas se vuelquen a la búsqueda de talento más junior, o perfiles que vienen de otros sectores”.