El incremento en el uso de smartphones y la pérdida de terreno de los teléfonos básicos, exigen a las empresas ciertos cambios. Esto puede verse expresado en porcentajes, considerando que el segmento de los smartphones creció un 31% en el 2014, pasando de 7,3 millones a 9,6 millones de unidades. Estas cifras son aún más pronunciadas en el 2015, año en el cual el 84% de los celulares vendidos fueron smartphones. Esta realidad ineludible impulsa a las empresas a adaptarse continuamente para mantenerse actualizadas y no perder cuota de mercado.