Los que tuvieron la posibilidad de visitar la Feria Internacional de Turismo (FIT) este año, encontraban que en el medio del pabellón internacional, y a toda hora, se formaba una larga y ordenada fila de personas. ¿Qué generaba tanto revuelo? El stand de la ciudad mendocina de San Rafael, que sin dudas, fue de los más –sino el más- concurridos, en buen parte gracias al ingenio y a la creatividad de sus expositores que entre sonrisas y chistes ofrecían de manera variada y continua algunas de las exquisiteces locales: ciruelas disecadas, aceitunas, panes con jamón crudo cortado directamente de la pata, y por supuesto, vinos tintos, blancos rosados y espumantes.