Argentina logra así un nuevo récord gastronómico internacional
El Consejo de Denominación de Origen Salame de Tandil presentó el salame curado más largo del mundo, luego de haber logrado el récord del salame más largo de América en el 2014 (16 metros), 2015 (21 metros) y 2016 (28 metros). La pieza, de 41,9 metros de longitud y 120 kilogramos, fue medida por el cocinero Juan Braceli y compartida con el público el sábado 11 en el Anfiteatro Municipal, en el marco de la XXXIV Edición del Festival de la Sierra, llevado a cabo entre el 9 y el 12 del corriente.
Además de diversos espectáculos musicales y de danza y ferias artesanales, durante el festival se pudo visitar el espacio DOT, un nuevo salón de exposición de embutidos y fiambres donde los concurrentes disfrutaron de sándwiches y las tradicionales picadas tandileras. También, se llevaron a cabo diversas charlas informativas y degustaciones de productos del Consejo de Denominación Salama de Tandil en la sexta edición de Chacinar. En este marco, se elaboró el salame más largo el mundo, para el cual trabajaron más de 70 personas y que conllevó una logística especial dentro de las fábricas para la producción del embutido de tal extensión.
El Salame de Tandil cuenta con la primera Denominación de Origen del país para un alimento agroindustrial. Obtenida en 2011 –después de 15 años de estudios de factibilidad, en los que trabajaron activamente las empresas chacinadoras y el Ministerio de Agroindustria- la D.O. busca proteger un producto genuino e histórico de la región. El clima, las pasturas y el ganado de la zona son claves para la obtención del sabor que distingue a este producto en el mundo y que se ha convertido en un clásico de las picadas de los argentinos, cuyo consumo crece día a día.
Entre los festejos por este nuevo logro, Juana Echezarreta, Presidente del Consejo de la Denominación de Origen Salame de Tandil, comentó: “Es un orgullo para los productores haber batido esta marca, es el reflejo de los esfuerzos que realizaron nuestros antepasados cuando comenzaron a adaptar sus recetas a las condiciones de esta región. Es el espíritu de una comunidad que busca el progreso, sin perder sus raíces”.