El universo de las tinturas ofrece posibilidades para todos, incluso para aquellos que tienen pieles extremadamente sensibles. Por eso, desde hace tiempo, en la Argentina existe una coloración semipermanente sin PPD. Este elemento es una molécula orgánica que está en los grupos fenólicos y su acción hace que tenga cierto potencial a provocar irritación en la piel. Tener en el mercado una tintura sin ella es un avance para quienes han tenido reacciones alérgicas previas y también para quienes comienzan a teñirse a edades tempranas.
El PPD está presente en muchos productos, como en medicamentos que la contienen en baja concentración. Ejemplo de esto son algunos de los que se utilizan para tratar el asma. Esta molécula se incorpora a nivel sistémico. En las tinturas se la incluye como precursor, es decir, junto con otro colorante se oxidan al entrar en contacto con el agua y así forman el color buscado. Si bien no es muy conocido, este producto está en casi todas las tinturas, incluso en el henna que sin él daría solo tonos naranjas.
Eliminar el PPD de la fórmula de las coloraciones es un nuevo concepto. Además, las semipermanentes traen muchos beneficios, pues tampoco poseen amoníaco, yodo, sulfato, resorcinol ni parabenos. Entre sus virtudes figura que no producen alergias, brinda un tono suave, mejora el cabello dándole más brillo y luminosidad y si no se quiere repetir su uso se va con los lavados. La han usado personas albinas y no tuvieron problemas. También es indicada para las adolescentes pues su composición no daña sus cabelleras.
Esos raros casos
Para acercarle tranquilidad a todas las usuarias, es importante aclarar que no es una sustancia mutagénica (éstas son las que a consecuencia de una exposición inhalatoria, oral o cutánea pueden producir o aumentar las posibilidades de producir alteraciones en el material genético de las células) ni cancerígena. Sí puede generar una reacción alérgica, aunque esto se da con muy baja incidencia, por eso cuando ocurre es noticia. El PPD se utiliza mundialmente en el 90% de las coloraciones capilares.
Esta molécula no está prohibida ni en los Estados Unidos, el Mercosur ni en la Unión Económica Europea. En la Argentina su uso está reglamentado por el Anmat que expone que debe ser usada con concentración limitada y las cantidades están reglamentadas por ley.