Los dos mayores fabricantes de automóviles de Japón, Toyota y Nissan, pedirán a Gran Bretaña que les reembolse los gastos adicionales de aduana en los que incurran si el gobierno británico no llega a un acuerdo comercial Brexit con la Unión Europea, informó el lunes el diario financiero Nikkei.
Las empresas – Toyota Motor Corp 7203.T y Nissan Motor Co Ltd 7201.T – quieren que los pagos cubran el 10% adicional de impuestos sobre las importaciones de automóviles de Gran Bretaña que la UE impondría en caso de que Gran Bretaña se retire de la UE sin un acuerdo, dijo el Nikkei, sin citar fuentes.
Los funcionarios de los fabricantes de automóviles se negaron a comentar el informe, aunque Nissan expresó su preocupación por el posible impacto de un Brexit sin acuerdo en su negocio.
“Instamos a los negociadores del Reino Unido y de la UE a que trabajen en colaboración para lograr un Brexit ordenado y equilibrado que siga fomentando un comercio mutuamente beneficioso”, dijo Nissan.
El primer ministro británico Boris Johnson dijo el domingo que no quería particularmente que el período de transición de Brexit, que se extiende hasta el final del año, se agotara sin un acuerdo comercial, pero que Gran Bretaña podría vivir con tal resultado.
El informe nikkei, sin embargo, subraya cómo el hecho de no acordar una nueva relación comercial podría llevar a las empresas extranjeras que operan en Gran Bretaña a reconsiderar la viabilidad de las operaciones frente a los aranceles adicionales que erosionan la rentabilidad, y los controles y regulaciones aduaneras que ralentizan las operaciones.
Toyota opera una planta en Derbyshire, en el centro de Inglaterra, y produjo aproximadamente el 8% de los 1,52 millones de coches fabricados en Gran Bretaña en 2018. También produce motores en una fábrica en Gales.
Nissan tiene una planta de fabricación en Sunderland, al noreste de Inglaterra, que emplea a 7.000 personas. Esa fábrica sería “insostenible” si Gran Bretaña deja la UE sin un acuerdo comercial, dijo Nissan en junio.
Nissan dijo en marzo que estaba impulsando los planes para construir su nuevo vehículo deportivo utilitario Qashqai en Sunderland. Cuando anunció por primera vez la inversión de 52 millones de libras en 2016, el fabricante de automóviles dijo que había obtenido garantías del gobierno británico de que Brexit no afectaría su competitividad.
Fuente: Reuters
